Después de mi osadía con el pan, hoy os enseño mi "atrevimiento" con unos chorizos.
De todos es sabido que el día 11 de Noviembre, se celebra el San Martín. Día en el cual, por lo menos en Galicia, que tiene por costumbre efectuar la matanza del cerdo. Este año, por cuestiones de climatología, se está retrasando un poco porque todavía no hace suficiente frío.
Y yo, ni corta ni perezosa, me propuse este año celebrar el San Martiño a mi manera.
Como vivo en un piso, no dispongo de un lugar para "criar" un cerdo, por lo que los chorizos los hice con carne comprada en el supermercado. Preparé poca cantidad pues es la primera vez que los hago.
CHORIZOS GALLEGOS "LECHUZA"
Ingredientes:(para 18 chorizos)
2 kgs. de carne de cerdo ( lomo y jamón)
250 grs. tocino blanco fresco
3 cucharadas colmadas de pimentón dulce
1 cucharada rasa de pimentón picante
1 cucharada colmada de orégano
1 cucharada rasa de sal
1 vaso de vino blanco
6 dientes de ajo bien picados
4 metros de tripa natural
Para hacer los chorizos es indispensable disponer de una máquina que nos hace la labor de picar y luego rellenar los mismos. Esta pertenece a mis suegros desde hace muchísimos años. Seguro que ahora las hay más modernas, pero esta todavía funciona perfectamente.
En primer lugar, picamos la carne y el tocino con la máquina. Yo la he pasado dos veces pues me parecía que quedaba muy grande. El tocino lo he picado luego manualmente para que quedasen los trocitos lo más pequeños posible.
Una vez tengamos la carne lista, le añadimos los ingredientes; sal, orégano, ajo bien picadito, pimentón dulce y picante y el vino blanco. Amasamos bien para que se reparta todo uniformemente.
Cuando la carne esté ya adobada hay que dejarla unas 24 horas en reposo. La colocamos en una fuente y la cubrimos con film plástico y la introducimos en la nevera hasta el día siguiente.
Ahora es el momento de "probar" la zorza. Tomamos una pequeña porción y la freímos con una pizca de aceite. Si hace falta sal, es el momento de añadirlo. También podemos rectificar de picante si fuese necesario.
La tripa la pondremos en agua templada para lavarle el exceso de sal. A la máquina picadora, le quitamos la cuchilla y le colocamos el embudo. Sobre éste, ponemos la tripa con mucho cuidado para que no se rompa. Llega el gran momento.......
Vamos introduciendo la "zorza" por la boca de la máquina y giramos la manivela. Enseguida empieza a salir por el embudo y se va metiendo en la tripa. Es en este momento cuando hay que hacer un nudo en la punta para que no se salga el relleno.
Seguimos girando hasta acabar con toda la carne. Hacemos un nudo final y cortamos la tripa.
Ahora, hacemos nudos a distancias regulares según el tamaño que queramos darle a los chorizos. Una vez terminado el proceso, los tenemos que colgar en un lugar seco y fresco hasta que estén bien curados.
Sólo queda esperar.....os aseguro que el olorcito que emana de los chorizos hace muy difícil no caer en la tentación de hincarle el diente a la primera de cambio.
Desconozco cuentos días tardarán en estar listos para comer, supongo que dependerá de la temperatura y de la humedad del ambiente. De todos modos, tengo que tener cuidado, tengo un par de "sabuesos" ( mi costillo y mi perro) que andan rondando la cocina más tiempo de lo que en ellos es habitual.....